Biopic de Jane Froman, cantante de formación clásica que alcanzaría gran popularidad en el teatro y en programas de radio y televisión. El papel de Froman está interpretado por Susan Hayward, pero en todas las canciones la voz está doblada por la propia Jane Froman. La involucración de Froman en el rodaje de la película da pie a que la película sea más rica en detalles pero, en su conjunto, más impostada y relamida.

Cinematográficamente la película es sosa y con interpretaciones muy dispares e irregulares. Un guion muy desbalanceado –que aprovecha la biografía de Froman para desempolvar el renaciente espíritu bélico y patriótico–, da pie a que, de los 117 minutos de duración, 25 estén dedicados al viaje en avión que se estrella cuando Froman vuela a Europa y a su posterior ingreso y convalecencia en hospitales, operándose y recuperándose de las graves heridas sufridas y cantando para soldados; hechos que sin duda marcarán la vida de Froman, que se verá obligada a usar muletas para desplazarse, pero que carece de sustancia narrativa, no parece impactar en las facetas artísticas de la cantante y resulta un agónico relleno.

Desde un punto de vista musical, el aspecto más relevante de la película es que no tiene objetivos cinematográficos, sólo discográficos. La película se pliega a los requerimientos promocionales del LP que se publicará posteriormente con la banda sonora y desde un principio queda patente que se busca incluir, sin respetar los ritmos internos de la película, el mayor número de canciones. El planteamiento será un éxito comercial de la discográfica y el LP será uno de los más vendidos en 1952. Los grandes éxitos de la época se suceden uno tras otro, en versiones de dudoso acierto y a costa de descafeinar el pulso de la trama: That Old Feeling, de Sammy Fain y Lew Brown; Get Happy, de Harold Arlen y Ted Koehler; Blue Moon, de Richard Rodgers y Lorenz Hart; Embraceable You, de George e Ira Gershwin; Tea for Two, de Vincent Youmans e Irving Caesar; With a Song in my Heart, de Richard Rodgers y Lorenz Hart; On the Gay White Way, de Ralph Rainger y Leo Robin; It’s a Good Day, de Peggy Lee y Dave Barbour o They’re either Too Young or Too Old, de Arthur Schwartz y Frank Loesser. Estos dos últimos temas, entre otros, son interpretados por Hayward/Froman en los improvisados espectáculos que se ofrecían como entretenimiento a los soldados heridos en el frente de la Segunda Guerra Mundial.

Por si se habían incluido pocas canciones, ya cerca del final de la película se embute un popurrí patriótico que comienza con America the Beautiful y Wonderful Home Sweet Home y sigue recorriendo diversas ciudades y estados a golpe de canción coreada por la alegre tropa: Nueva York, Chicago, California, Virginia, Indiana, Alabama, Texas…