Productora/Distribuidora:
Metro-Goldwyn-Mayer
Estreno: 22-07-1954
Duración: 102 min.
Subgénero: Narración musical
Tramo: D
Seven Brides for Seven Brothers
(Siete novias para siete hermanos)
Este musical cuenta con dos grandes aciertos. El primero, su memorable título, pues incluso el público que nunca ve musicales sabe que se trata de una película musical. El segundo, su decidida apuesta por la danza, con coreografías de Michael Kidd. De los siete protagonistas masculinos, los hermanos Pontipee, cuatro eran bailarines profesionales y, un quinto, un gimnasta que ampliaba las coreografías con acrobacias sin desnudarlas de sensibilidad. Únicamente los dos hermanos mayores o no bailaban –el caso de Howard Keel, protagonista y cantante– o bailaban poco –Jeff Richards, en las coreografías es el que siempre aparece situado al fondo–. En cuanto a las siete novias, todas eran bailarinas profesionales.
Stanley Donen, como realizador, y George J. Folsey, director de fotografía, harán un formidable e innovador trabajo, junto con Kidd, planificando y encajando personajes y movimientos en los planos para que, las alargadas proporciones del CinemaScope y las coreografías, se aportasen una a otra y extrajesen mutuamente todas sus posibilidades. Igualmente es importante la labor de Folsey para extraer todo el colorido de las imágenes, rodadas en AnsCo Color, con el que luce el sensacional vestuario diseñado por Walter Plunkett (Gone With the Wind, Fleming; 1939; Singin' in the Rain, Kelly-Donen, 1952).
Según lo anterior, lo mejores momentos de esta exitosa película dirigida por Stanley Donen suceden cuando convergen el protagonismo de las coreografías de Kidd, el vestuario de Plunkett y la fotografía en CinemaScope de Folsey. El primero gran momento es el número House-Raising Dance.
https://www.youtube.com/watch?v=TygmMPbwfjAEl segundo, Lonesome Polecat, un número complejo, de ritmo hipnotizante, que incorpora a la coreografía herramienta y troncos y, a la banda sonora, la percusión de las cuñas y los silbidos de las hachas, rodado en un único plano, con suaves movimientos de cámara y bailarines que se extienden de modo uniforme por la enorme pantalla, como delicadas figuras mecánicas puestas en movimiento por un gigantesco reloj barroco.
https://www.youtube.com/watch?v=q9-jbBbjLUcBrillan, pues, las secuencias más corales y coreográficas del musical. Descontado lo anterior, la película resulta redicha, las canciones aburridas y las interpretaciones irrelevantes.