Cartel

Notas de Cine Musical

Productora/Distribuidora:
Paramount Pictures

Estreno: 17-06-1970

Duración: 129 min.

Subgénero: Ópera cínema

Tramo: -


Notas de Cine Musical
  • Coreografía


On a Clear Day You Can See Forever


(Vuelve a mi lado)



En 1956 se estrenó en Broadway uno de los musicales más exitosos de la historia, My Fair Lady, con libreto y letras de Alan Jay Lerner y música de Frederick Loewe. La fama del musical se extenderá a todo el mundo gracias a su adaptación cinematográfica (Cukor, 1964) y a los ocho premios de la Academia, incluyendo a la Mejor Película, Actor y Director. Más allá de los elementos anecdóticos, la obra se basaba en el inopinado enamoramiento entre un excéntrico científico misógino, el Profesor Henry Higgins, y una vitalista analfabeta, Eliza Doolittle. El emparejamiento –un acertado aggiornamento del clásico príncipe y campesina, o millonario y corista– resultará del agrado del público y dará pie a nuevos proyectos, como este On a Clear Day You Can See Forever, aunque la idea estaba ya tan amortizada que había sido utilizada incluso en comedias infantiles, como Doctor Dolittle (Fleischer, 1967) o Chitty Chitty Bang Bang (Hughes, 1968).

El musical original de On a Clear Day se había estrenado en Broadway con libreto y letras del mismo Alan Jay Lerner y música de Burton Lane. Esta fantasía musical empareja al profesor Marc Chabot, psiquiatra y profesor universitario, experto en hipnosis y coloquialmente misógino, que suelta gracejos del tipo ¡Qué criatura extraña es la mujer! (…) Señor, ¿por qué no hiciste antes a la mujer, cuando estabas animoso?, con una mujer simple, caótica, vital y con poderes extrasensoriales, como la clarividencia o hacer crecer las flores con el pensamiento.

Para la versión cinematográfica, la Paramount contrató a Yves Montand y Barbra Streisand para los papeles protagonistas. Y a Cecil Beaton –uno de los componentes de éxito de My Fair Lady– para el diseño del vestuario.

La película es larga, aburrida, no tiene ritmo de musical y los números –las más de las veces, una suerte de soliloquios de los protagonistas– son canciones mal engarzadas con la trama, grabadas con efectos de sonido que no empastan con las escenas y que llevan a sobreactuar a la siempre sobrada Barbra Streisand.

Seguramente la trama era del gusto del ideario hippy, contraponiendo poderes extrasensoriales e ideas de reencarnación con sabor oriental al academicismo ortodoxo de un profesor universitario, pero hoy resulta irregular, entre lo repetitivo y lo incompleto, con personajes sin desarrollar, como Jack Nicholson/Tad Pringle, o simplemente esbozados, como Larry Blyden/Warren Pratt.

Este sería el penúltimo musical y película de Minnelli, únicamente reconocible por el guiño que realiza a través del vestuario de su color marca de la casa.

El tema que da título a la película, On a Clear Day, –en el original inglés, pues en España los distribuidores decidieron cambiar el título por la traducción de otra canción, Come Back to Me, cantada por Montad– es interpretado al final de la película, primero por Yves Montad y luego como reprise por Barbra Streisand.

https://www.youtube.com/watch?v=x1BpKIb7Ces

Con este panorama, sin duda lo mejor de la película es la secuencia de los títulos de crédito, de un alucinógeno estilo pop-art, acreditada al famoso diseñador Wayne Fitzgerald. Otros musicales con títulos de crédito realizados por Fitzgerald son The Music Man (da Costa, 1962), My Fair Lady (Cukor, 1964), Camelot (Logan, 1967), Funny Girl (Wyler, 1968), Mame (Saks, 1974), Funny Lady (Ross, 1975) o Pennies From Heaven (Ross, 1981).

http://www.artofthetitle.com/title/on-a-clear-day-you-can-see-forever/