Cartel

Notas de Cine Musical

Productora/Distribuidora:
Universal Pictures

Estreno: 06-04-1990

Duración: 85 min.

Subgénero: Narración musical

Tramo: -


Notas de Cine Musical
  • Música
  • Letra


Cry-Baby


(El lágrima)



La peculiar cinematografía de John Waters había logrado entrar en los circuitos comerciales con su anterior película, Hairspray (1988), y el productor le confió un buen presupuesto. Sin duda hay que reconocerle a Waters el gran mérito de saber rodar productos marginales pero rentables. Asimismo, saber crear obras versátiles, capaces de recorrer el camino inverso al habitual, pues Cry-Baby será adaptada para la escena teatral al igual que había sucedido con Hairspray.

La película, con la habitual estética camp de Waters, en la que la fealdad es su salsa, pretende ser gamberra pero no pasa de chusca. Intenta lucir galones de irreverencia como The Last Rocky Horror Picture Show (Sharman, 1975) y parodiar genuinas parodias como Grease (Kleiser, 1978), pero se mueve en una pura zona de confort y ni siquiera mueve a risa su histriónica deriva entre el feísmo y la fritanga. El mayor baldón que soporta esta película proviene de aquellos que la califican como una obra de culto, algo que, para un espectador con formación media y que no esté a sueldo de la productora resulta humillante, no ya por la falta de fundamento, sino por ser patentes las ansias del director de, a priori, intentar rodar una obra de culto.

No hay nada reseñable desde un punto de vista dramático y el desarrollo de los personajes se reduce a una caricatura de gente paleta –ellas, tetudas; ellos, elementales– sin gracia ni recorrido. La música, que es abundante, suena de fondo como una suerte de recopilación de época, acaso para redondear las cuentas con la venta de discos de la banda sonora.

Lo más famoso de la obra proviene de aspectos colaterales. Se trata de una de los primeras películas de Johnny Depp –que canta doblado por James Inteveld–, actúan varios secundarios famosos –Iggy Pop, Willem Dafoe– y entre las actrices figura una antigua actriz porno, famosa no por sus labores, sino por su paso por los juzgados tras revelarse que muchas de sus películas las había rodado siendo menor de edad.

Casi al final de la película se encuentra, sin embargo, un número desabrido pero muy correcto, Please, Mr. Jailer, en el que la novia pija acude a la puerta de la cárcel para pedir la liberación de su chico. Waters vuelve a imitar Grease (Kleiser, 1978) y cae en el costumbrismo de que sea la chica quien adopte la tribu y estética del chico. Igualico igualico que el difunto de su agüelico.

https://www.youtube.com/watch?v=8T--XIWND6k