Deanna Durbin había interpretado su primer papel como protagonista en Three Smart Girls (Koster, 1936), convirtiéndose ipso facto en la artista adolescente por antonomasia, modelo de amor filial, referente de las girl-next-door y artista fetiche de los estudios Universal a los que salvaría de la bancarrota con su primer película. Su carrera será breve –muy breve, si se considera su fabulosa, atronadora popularidad–, pues rodará su última película, For the Love of Mary (Cordoba) en 1948, coincidiendo con el final de su adolescencia y la desaparición de la sociedad previa a la Segunda Guerra Mundial.

Something in the Wind será su antepenúltima película. Lo más reseñable de la misma es el número I Love a Mystery interpretado por Donald O’Connor, donde se reconoce el boceto de la que sería su antológica y extenuante interpretación, cinco años más tarde, del número Make Them Laugh (Singing in the Rain, Kelly-Donen, 1952) en el papel de Cosmo Brown.