Productora/Distribuidora:
RKO Radio Pictures
Estreno: 02-09-1938
Duración: 83 min.
Subgénero: Narración musical
Tramo: -
Carefree
(Amanda)
Tras haber repetido siete veces la fórmula Astaire&Rogers, la RKO había asumido que debía permitir a la pareja tomar un poco de aire por separado. Aunque su trabajo conjunto estaba muy valorado por la crítica y el público, ambos actores estaban hartos personalmente y preocupados profesionalmente por el encasillamiento que ese mismo éxito les causaba. Así que, para que disiparan un poco, en 1937 la RKO les había permitido que trabajaran por separado. Astaire rodó A Damsel in Distress (George Stevens, 1937), un musical insulso. Por su parte, Rogers dejó la comedia musical y, con cierto éxito, interpretó dramas. Una vez terminado el descanso, la RKO les requirió para una nueva comedia musical, repitiendo una vez más la fórmula de Astaire y Rogers como protagonistas, Sandrich en la dirección, música de Irving Berlin, guion de Scott y Pagano y coreografías de Hermes Pan.
Para intentar renovar el producto, se cambiaron todos los habituales secundarios, pero la realidad es que los nuevos, o bien no aportan nada o bien no pudieron por sí solos levantar el derrumbe general, ni siquiera las experimentadas Clarence Kolb y Hattie McDaniel, sólida actriz y sempiterna interprete de criada negra en Hollywood. Asimismo parece como si los productores, intentando darle otra mano de barniz al conjunto, apuntaran más hacia la comedia a secas que al musical romántico, pues la obra incluye menos números musicales de lo habitual. En esta línea, Astaire cambia su típico papel de profesional del baile por el de psicoanalista y, a Rogers, parecen intentar contentarla dándole un papel con más vuelo dramático, para que se salga del género y utilice más recursos de actriz.
El resultado es que la película no funciona, es lenta y tiene números pesados. Económicamente, los productores tampoco obtienen los resultados esperados. La gallina había dejado de poner huevos de oro.
Como sucede normalmente, el humor pocas veces viaja bien en el tiempo y, precisamente por intentar hacer una película más cómica, esta obra ha perdido más nervio que las anteriores de la pareja. En todo caso, la fórmula se muestra agotada y, aunque al año siguiente Astaire&Rogers todavía rodarán una película más con la RKO –(The Story of Vernon and Irene Castle, Potter, 1939), su última película juntos en este estudio– no hay ninguna frescura en su labor. Para distraer al público de la evidente falta de química se muestra lo nunca visto: Astaire da un largo beso en los labios a Rogers. Sucede al final de I Used to Be Color Blind, número rodado con cámara rápida para mostrar la innegable elegancia técnica alcanzada por la pareja.
En la película sólo hay una rutina memorable, Since They Turned 'Loch Lomond' into Swing, pero es fabulosa, excepcional. La ejecuta Astaire en el campo de golf y es una abrumadora, casi mágica, demostración de ritmo, equilibrio, coordinación, precisión, sincronización y elegancia. La dificultad de la rutina se aprecia indirectamente, viendo la multitud de planos que se necesitaron para montar la secuencia, algo raro en los solos de Astaire, aunque también el montaje es magnífico. Sobresaliente.
https://www.youtube.com/watch?v=QvFXuGdvDUEEl resto de los números son irrelevantes; alguno especialmente pesado, como The Yam, tema con el que el estudio ratifica que está grogui: pretende repetir el éxito de La Carioca o El Continental, pero repite el estrepitoso fracaso de El Piccolino. El último número, Changes Partner, con Rogers hipnotizada ejecutando los pasos que le indica Astaire, confirma el manierismo típico de los finales de época.