Cartel

Notas de Cine Musical

Productora/Distribuidora:
20th Century Fox

Estreno: 24-05-1940

Duración: 127 min.

Subgénero: Biopic

Tramo: -


Notas de Cine Musical
  • Música
  • Letra


Lillian Russell


(La reina de la canción)



Biopic de la actriz y cantante Lillian Russel, paradigma e icono del espectáculo musical en Estados Unidos entre finales del XIX e inicios del XX. Como sucede con la mayoría de los biopics del género, cualquier parecido con la realidad, aparte de los nombres propios de los personajes, es pura coincidencia, pues el imperio de la moral de la época otorgaba más valor a las biografías blanqueadas que a intentar desvelar el hecho artístico o la naturaleza creativa del artista biografiado.

La película es más pesada que sólida, y absurdamente lenta. A pesar de que el desenvolvimiento de la trama queda desde un inicio irreparablemente dañado por la censura y el panegírico, y de que el realizador es incapaz de imprimir ritmo a la obra – ni en el rodaje ni en el montaje– muchas escenas se sostienen a puro pulso gracias los conseguidos diálogos –por momentos excesivamente literarios– de William McGuire, escritor y director de teatro al que se le deben los textos de The Kid From Spain (McCarey, 1932) y sobre todo de The Great Ziegfeld (Leonard, 1936), el primer gran biopic del género y por el que McGuire estaría nominado al premio de la Academia.

Los números musicales coreografiados por Seymour Felix son historicistas y ajustadamente sosos, repolludos y desmañados, remarcando la estética de la época, con una Lillian Russel encorsetada en un corpiño que realzaba sus volúmenes, bajo un gigantesco sombrero y sosteniendo un enorme bastón.

La película aprovecha la ocasión para capitalizar los grandes éxitos de la época, recreándose varias veces en After the Ball, el mayor hit parade de la última década del XIX y tema inexcusable en cualquier recreación de aquellos años, tal como demuestran San Francisco (Van Dyke, 1936) o Show Boat (Whale, 1936), tanto en la  inmejorable versión de Irene Dunne como en su remake (Sidney, 1951), interpretado por Kathryn Grayson.

Los temas originales de la película fueron Adored One, de Alfred Newman y Mack Gordon, y Blue Lovebird, de Bronislau Kaper y Gus Kahn. El resto, diversos temas de época: Sung twice, Back in the Days of Old Broadway, Under the Bamboo Tree, The Battle Cry of Freedom, Comin' Thro' the Rye, Brighten the Corner Where You Are, The Band Played On o Ma Blushin' Rosie. El tema Come Down Ma Evenin' Star es el mejor llevado a pantalla, con un sencillo cambio de plano de Faye, cantando el tema a su padre en el jardín de casa, a cantarlo sobre el escenario.

https://www.youtube.com/watch?v=kEx4b--7Rjs

Aburrida, la película realiza un homenaje a clásicos del vaudeville contemporáneos de Lillian Russel, como el dúo Weber & Fields, con un número interpretado por ellos mismos, y Eddie Foy, interpretado por Eddie Foy Jr., pero, descontando los aspectos historicistas y documentales, no ofrece otro interés.